29/5/08

Ruta de palabras, palabras de ruta




Fuguémonos juntos para nunca mas volver, como aquellos dos desaparecidos cuyo vuelo viajó tras la luz. Todo está cronometrado. El viaje comienza. Dos jóvenes preparan sus maletas, en ellas llevan cuaderno, lápiz, y cámara de fotos. Salen temprano y aun de noche, dándole la bienvenida a los primeros rayos de luz, respirando el frio de la mañana, sintiendo los latidos del compartido e incansable amor por la ruta. En sus miradas se puede apreciar la curiosidad y ansias por viajar. La tierra queda expectante ante tal visita. Comienzan a caminar, a navegar, a volar. Se dirigen juntos rumbo al destino por el cual creen en la ruta. A cada paso que dan se impulsa el mecanismo que los dirige: escritos sobre hojas secas de árboles perdidos, fotografías captadas para revelarlas en algún sueño, letras de periódico recortadas para componer el guión de la ruta. Caminan por un puzzle que siempre se completa y en el cual cada pieza está calculada con vistas a un fin.
Llegan al punto de partida. Tras él todo un mundo les espera. Se aventuran hacia sus sueños, navegando en la misma barca, cruzando la desembocadura de un rio. Siguen día a día, con el valor de la lucha y resistencia por conseguir el sueño común. Trepan por las paredes de un litoral virgen, se esconden en ellas, se dejan caer y en la arena de la playa dejan en una botella sus secretos. Vuelven a su refugio una vez más, entre los pinares y el cobijo de estos, en una playa nunca antes descubierta. Se arrojan al suelo, y en plan de lucha se arrastran por combatir la soledad. Negociando con las razones para llegar al trato de que ellos no son producto de ningún algoritmo matemático, son hijos de la locura, escapan de la cárcel para por siempre serles devuelta la libertad, o a conquistarla a fuerza de puño y letra. Trazan los dibujos del sendero que recorren, y los inmortalizan en las líneas de sus manos. Siguen caminando, construyendo el mañana, volviendo de regreso a la niñez, al sentimiento bajo los sueños que sólo escucharon los árboles que fueron bendecidos con el vino de la noche. A los gritos de euforia les sucedieron los abrazos, a los llantos por alegrías pasadas les sucedieron risas por penas pasadas, y la diferencia entre lloros y risas viajaba en la caldera de aquella locomotora que avanzaba por las vías que trazaban, y se detenían en las estaciones de aquel mundo que tiempo atrás comenzaron a descubrir. Aquel mundo por el que viajarían, fugándose para nunca más volver.

28/5/08

Cruz y Cara


El sonido de las palabras, de su eco... ese es el sonido mas hermoso que alguien puede apreciar. El encanto perdido de las palabras, y que decir de su eco. La oportunidad de volver a escuchar las mas bellas composiciones, narrando sentimientos. O tal vez la imposicion de volver a oir las mismas crueldades. Quien sabe, unas veces cara, otras veces cruz.
Nadie elige su destino, será la vida quien nos lo marca. Quien nos regala estos momentos preciosos. Nuestra vida tiene momentos de cara y otros de cruz, pero le demos las vueltas q le demos, al fin y al cabo es una vida. Dos caras en una. Somos dos en uno.

25/5/08

Como la vida




El cielo anuncia tormenta. Cuatro pájaros cantan con timidez. Cuatro gotas mojan mi papel.
Entre una nube oscura y un cielo claro, alumbrado por la luz del sol, se deja ver un arco iris poco contrastado. Las gotas se hacen más intensas. El arco iris más visible. Tú más ausente.
Te recuerdo bajo el agua, bajo su sonido, bajo medio arco de colores. Bajo la luz del impactante rayo que se deja oír a escasos segundos.
Bajo el atrevimiento del recuerdo te siento. Mis letras cada vez son más rápidas. Paralelas al agua que cae, que moja la tierra y la humedece.
Siento tranquilidad. La lluvia choca contra el suelo y me llena de calma. Los colores son una mezcla entre cálidos y fríos. El ambiente provoca un suave frescor. Parece que la calma vuelve, aunque será rota por otro estruendo que anuncia que la tormenta se hará pronto dueña de todos nosotros. Te quiero. Mis ojos buscan la luz, aunque no quieren olvidar la oscuridad. Somos dos convertidos en uno.
La ciudad vive bajo un manto gris, respaldado por los colores del medio arco. ¿Dónde está su mitad? Quizá donde te encuentres tú. Entonces iré a buscarla. El ruido se apodera de mi pensamiento, de mis escritos. Pero no de nosotros. Te siento aquí, conmigo.
El paisaje: mitad oscuridad, mitad claridad. Como la vida. Como dijeron tus palabras: "después de la tormenta llega la calma". Y es que, después de ti, no hay nada.

20/5/08

Por Ti


Consiguió que su sonrisa renaciera. Consiguió espantarla de los miedos. Ahuyentó sus límites y sin opción a elegir la hizo vivir.
Brotó la alegría en ese jardín de espinas, corrió la savia de la locura por los senderos de la razón y ganando la carrera se apoderó de esta vida. Entre nubes encontró, lo que sin buscar, con ansias esperaba: un corazón que le supiese amar, una mente que le bailase el agua, que bebiese de la fuente de su pasión, que saborease la clave de cada gesto, que supiese vivir y le enseñase a hacerlo.
Borró la pena que consumía su alegría. Deshizo el baúl de la soledad y lo convirtió en comprensión, en cálidas fragancias que arropaban su fragilidad, o quizá su poder.
Ardió su llama con viveza. Solo esa persona tenía la llave que abría la calidez de su ser.

18/5/08

Imaginaciones bajo la sombra de dos árboles


Imagina que despiertas bajo el refugio de dos árboles, contemplando el verdor de sus hojas, el abrigo de su ramaje. Despertaras como si fuese un nuevo nacer, bajo el caríño y amor del hogar perdido, viendo la primera luz de tu vida al abrir los ojos, viviendo la alegría que un dia perdistes en el juego de tu vida. No dudarias en reir, reir y reir, ser feliz y aprovechar el sentimiento de volver a las andadas, de recoger lo sembrado, de olvidar el llanto. Seguro que volverias a ser tu mismo, ese personaje que nadie conoce, que la sociedad nunca etiquete, ese personaje que volviese a despertar en una nueva oportunidad a reir. Lo primero que harás sera levantarte, ir en busca del sol, evitando la noche, contemplar el paso del día en la despedida del horizonte, hacer balance de un dia en el cual has nacido de nuevo, en el cual has arriesgado por vivir cada uno de sus segundos como si fuese el ultimo suspiro de tu vida. A la noche regresarías al hogar, al refugio de aquellos árboles en los cuales despertastes un día para nunca mas olvidarlo, el comienzo y fin de una vida, una vida en la que estarás acompañado de esa persona a la cual lees y escribes.
Y despues de todo pasaras de imaginar a recordar lo que hicistes en aquel día.